La lucha diaria/ensayo

LA LUCHA DIARIA

POR: MARY BERMUDEZ

La tarde es lluviosa, yo estoy ociosa y tomo la computadora, después de un debate con Beatriz… en donde ambas llevábamos nuestras razones y sin razones. Respiro profundo y comienzo a pensar en cómo dar respuesta a las preguntas existenciales de mi prima. No tengo respuestas lo único que sé es que la vida se trata mucho de actitud, seguido de una constante lucha por salir adelante, encontrar la forma de ganar más o gastar menos… lo que ocurra primero. Incluso la mejor forma de acercarse a los hijos, mantener la confianza y comunicación abierta. Esto se da en todas las familias, en todo el mundo.


Nada mejor que criar hijos para que sean exitosos e independientes y la mejor forma de hacerlo es siendo un padre igualmente exitoso e independiente.


Todo lo anterior no es fácil… poder lidiar con todo esto y en especial para nuestro “gremio”, llamo nuestro gremio a las mujeres (e incluso hombres) divorciadas con hijos, una carrera profesional activa o no, acompañada de unas intensas ganas de vivir en plenitud y ¿porque no? Encontrar al compañero de vida que antes, no pudimos o supimos elegir.


Muchos de nosotros sin quererlo, ni pensarlo, boicoteamos nuestros planes, sueños y proyectos, so pretexto de los hijos. La verdad es que tenemos miedo, si! miedo de hacer lo que hay que hacer y que resulte o que no, hacerlo y que parezca que hemos descuidado a los críos, así que lo vamos posponiendo, hasta que una noche nos damos cuenta que los hijos crecieron y hacen sus propios planes sin tomarnos en cuenta y sin nuestra opinión – ¡y qué bueno!

Es hasta ese doloroso e incomodo momento en el que entonces sí, nos sentimos libres de culpa y responsabilidad con los hijos, tomamos del baúl de los trebejos todos nuestros sueños, y planes pospuestos o relegados, nos los replanteamos y comenzamos a tejer a nuestro alrededor la mejor opción, ojalá lo hiciéramos mas por convicción y años antes… aunque es verdad aquello de que nunca es tarde…

En este punto es donde quiero detenerme, invitarles a luchar por cada ideal, sueño, siempre y convertirlo en una realidad, pues en todas las relaciones pero en especial entre padres e hijos, debemos sentirnos plenos, ser exitosos para poder invitarle a nuestros hijos de lo mismo. Recordemos que hay que enseñar con el ejemplo, así y solo así nuestros hijos, sabrán que nada es imposible, que si deben esforzarse y sacrificar para tener, pero que vale la pena, no ser conformista, ni mediocre.
Todos podemos tomar el control de nuestras vidas, si bien hay cosas que no podemos cambiar, también es cierto que podemos cambiar la forma en que nos afectan y trabajar en consecuencia.

Lo importante es no dejarse llevar por el pasado sino aprender de él, aprender que las personas siempre hablaran y que no estamos aquí para darles gusto a los demás, sino para darnos gusto a nosotros mismos sin dañar a nadie, ser felices y personas de bien.

Los hijos deben ser inspiración pero nunca expectativa, ellos se encargaran de su propia vida, nuestra labor es, educarlos, amarlos, desmenuzarles el mundo, guiarlos y aconsejarles en base a nuestra experiencia. La vida es menos compleja vivámosla ya.
A decir verdad no sé cómo es que me metí en esto… pero tengo claro cómo es que saldré… Feliz!