viernes, 27 de abril de 2012

El personaje/cuento corto.

Por Juan José Lara.


El personaje




En todas partes los conservadores tienen una figura emblemática. En Guatemala su referente principal es Rafael Carrera. Fue presidente entre mil ochocientos cuarenta y siete, y mil ochocientos sesenta y cinco.



Cristero, zafio y analfabeta, apenas ponía ¨Racaraca¨ al firmar. Los adalides de la clase media y la élite frecuentemente lo reivindican.

Conversando de ese entremés con Mario un periodista amigo mío, para comprobar que la historia es circular y casos similares son comunes modernamente, fui invitado a conocer un personaje.



En la sede del partido Vamos Guatemala conocí a Sotero López. Regordete, de piel color pardo, pedante, demasiado formal y ostentoso.



Instruido de antemano por Mario, yo anotaba las respuestas con la laptop en la entrevista respectiva:



- ¿Cómo incursionó en la política?



-Me buscaron porque yo he apoyado mucho al deporte.



- Dígame su pensamiento más íntimo cuando ganó como diputado a la última Asamblea Nacional Constituyente.



- En la lotería de la vida me tocó el premio mayor.



-¿Cuál es su actividad personal en la actualidad?



-Actividades comerciales.



-¿Profesa alguna religión?



- Soy ministro de una iglesia.



-¿Cuándo ganó la diputación no sabía leer?



En ese instante Sotero López se crispó; (imaginé al candidato mexicano Peña Nieto y su patinazo, cuando le preguntaron en la feria del libro de Guadalajara sobre los libros que había leído).



- No, pero después aprendí.



Ataviado con un traje azul marino procuraba cautivar, pero se lo impedía su pasión autoritaria.



La entrevista concluyó después de muchos lugares comunes. Expresó sobre las acusaciones a algunos políticos de tachas por poseer negocios con el estado, que era peor si los buscaran en las filas de los vagos; sobre los señalamientos de promiscuidad en su contra por tener muchas mujeres dijo que estaba próximo a contraer matrimonio.



Finalmente hace algunos años lo encontré en un supermercado con una jovencita parecida a aquellas salidas de un zulo. Me la presentó como su esposa, me dejó una tarjeta con sus datos personales con el encabezado: Sotero López, Asesor Presidencia de la República.



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