El Gobierno advierte al unísono que el recorte presupuestario será duro
De Guindos afirma que España hará un "esfuerzo redoblado" por la desviación del déficit y Sáenz de Santamaría promete austeridad
El Gobierno estudia eliminar el 20% de las entidades públicas
Guindos dice que España hará un "esfuerzo redoblado"
La CE frena la expectativa de una revisión rápida del déficit español
Los presupuestos serán "austeros, ajustados y realistas"
El déficit del 2011 alcanza los 91.300 millones, el 8,51% del PIB Madrid. (Redacción y agencias).- Con más o menos contundencia, los miembros del Gobierno español y también del PP confirman que el ajuste presupuestario que viene será drástico y profundo aunque evitan todavía dar ninguna cifra de recorte (se estima que podría ser de más de 30.000 millones de euros). Y es que las circunstancias obligan teniendo en cuenta el dato final del déficit público (8,51%) de 2011 que este lunes anunció el ministro Montoro y después de que este martes la Comisión Europea ratificara su intención de no relajar los objetivos a la espera de ver los planteamientos fiscales que le ofrezca el Ejecutivo español.
Por lo tanto, España deberá "redoblar esfuerzos", en palabras del ministro de Economía y Competitividad, Luis De Guindos, que asegura, en un mensaje dirigido a Bruselas, que la prioridad del Gobierno es el proceso de consolidación presupuestaria.
De Guindos ha reconocido que la desviación de más de dos puntos y medio porcentuales respecto al objetivo de déficit es un dato "malo" y "complicado" que hace que España incremente su esfuerzo de consolidación fiscal. "Somos absolutamente conscientes de que la política fiscal de España no sólo es importante para España, sino también para el conjunto de la Unión Europea", ha destacado.
Mensaje más matizado de la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, que, sin embargo, ha advertido de que el país tiene "la obligación de reducir el déficit" y ha recordado que ésta es una tarea a la que están obligadas todas las administraciones públicas sin excepción. "No podemos permitirnos otra cosa", ha sentenciado ante la Comisión del Senado.
Así, la vicepresidenta ha avanzado que el Ejecutivo deberá presentar unos presupuestos "austeros, ajustados y realistas" que transformarán "radicalmente" la forma de gestionar los recursos públicos. La vicepresidenta prefiere no "repartir culpas o poner excusas" por la desviación, sino de aprender lecciones del pasado para no repetir los errores y ponerles remedio.
Desde el PP, su portavoz en el Congreso, Alfonso Alonso, ha confirmado las internciones del Gobierno: el paquete de recortes será "sin precedentes". Alonso ha asegurado que el dato del déficit "obligará a un esfuerzo y a un ejercicio de responsabilidad que no tiene precedentes por parte de todo el mundo". El portavoz popular constara que "el año pasado fue un año desastroso" y ha criticado las previsiones del anterior Gobierno, que, según él, "provocaron una situación irreal de engaño".
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