La Eurocopa del Madrid
El equipo blanco cuenta con diez futbolistas entre los cuatro semifinalistas, una evidencia de la universalidad de su modelo ● Cristiano es feliz con el juego físico y directo de Portugal
Ramon Besa
Varsovia
25 JUN 2012 - 22:13 CET140
A la Eurocopa le ha quedado un cuadro de semifinales que ni pintado.
Hay pocos clásicos como el Alemania-Italia. Imposible olvidar una semifinal como la disputada en la Copa del Mundo de México 1970, todavía hoy considerada el partido por excelencia de un torneo mayor, o la final del Mundial de España 1982.
Y excepcional fue también el encuentro que disputaron en el de Alemania
2006. A los germanos solo les discuten su condición de favoritos los
italianos y la campeona, España, que se las verá con Portugal, un equipo
de larga tradición, necesitado de un título que acarició en tiempos de
Eusebio o de Figo.
Aunque son muy diferentes, tres de las cuatro selecciones tienen en cierto modo un denominador común, el Madrid, presente con 10 futbolistas: Casillas, Arbeloa, Ramos, Alonso y Albiol, internacionales por España; Cristiano Ronaldo, Pepe y Coentrão, figuras de Portugal, y Özil y Khedira, ahora mismo referentes de Alemania. Futbolistas como Coentrão han adquirido en su equipo nacional un protagonismo superior incluso al que tiene en Chamartín. El Madrid ha ganado la Liga después de tres temporadas de dominio del Barcelona y se nota tanto en La Roja como en los demás conjuntos que aspiran al título de la Eurocopa.
Hay un nuevo orden en el fútbol europeo de clubes. A excepción del
Borussia de Dortmund, el Ajax y el Oporto, que han revalidado sus
títulos en Alemania, Holanda y Portugal, los demás campeones de las
Ligas más importantes son nuevos: el Montpellier en Francia, la Juve en
Italia, el Manchester City en Inglaterra y el Madrid en España. La duda
es si el efecto parcial del cambio afectará al torneo que se disputa en
Polonia y Ucrania. Así las cosas, el partido entre España y Portugal
puede resultar especialmente interesante porque, siendo selecciones muy
distintas, el Madrid tiene una representación decisiva en las dos.
La presencia de Cristiano condiciona el juego de Portugal de la misma manera que también influye en el del Madrid. A ambos cuadros les distingue su fortaleza en las áreas y su facilidad para desplegarse a la contra a partir de vertiginosas transiciones. Nada que ver con el plan de inicio de la selección española, a la que se ha acusado precisamente de ser excesivamente pausada en su fútbol por el exceso de centrocampistas y la ausencia de delanteros. El estilo de La Roja remite habitualmente al del Barça, representado sobre todo por Xavi, Busquets, Iniesta y también por Cesc.
No es ajeno el equipo de Vicente del Bosque al mismo debate que hay en el Camp Nou sobre la ausencia de un nueve, papel que en el azulgrana asume Messi. Pero los 73 goles en 60 partidos que ha totalizado La Pulga en la temporada no le han servido al Barça para ganar la Liga mientras que los 60 de Cristiano le han valido al Madrid para cantar el alirón y a él para aspirar a destronar al argentino en la pugna por el Balón de Oro. Nunca como hasta ahora se había encontrado tan a gusto CR con Portugal, poderosa en el juego físico y directo, y jamás renegó España del sello del Barça, mejorado por el carácter y la determinación de los jugadores del Madrid.
La cantera de los blancos sigue generando futbolistas para la Liga
española y la mayoría de los que marcan la diferencia en la Eurocopa
pertenecen al equipo de José Mourinho. Una evidencia de la universalidad
de su modelo. A cambio, nadie juega al fútbol como España, solidaria y
coral, el jugador al servicio del equipo, el estilo como bandera,
siempre influenciada por la marca Barça. Visto así, la semifinal de
mañana presenta el mismo interés que el clásico de los clásicos:
Alemania-Italia. Hay más que un título en juego porque ahora mismo se
discute sobre las nuevas tendencias del fútbol europeo y mundial.
Aunque son muy diferentes, tres de las cuatro selecciones tienen en cierto modo un denominador común, el Madrid, presente con 10 futbolistas: Casillas, Arbeloa, Ramos, Alonso y Albiol, internacionales por España; Cristiano Ronaldo, Pepe y Coentrão, figuras de Portugal, y Özil y Khedira, ahora mismo referentes de Alemania. Futbolistas como Coentrão han adquirido en su equipo nacional un protagonismo superior incluso al que tiene en Chamartín. El Madrid ha ganado la Liga después de tres temporadas de dominio del Barcelona y se nota tanto en La Roja como en los demás conjuntos que aspiran al título de la Eurocopa.
La cantera de los blancos sigue generando
futbolistas para la Liga española y la mayoría de jugadores que marcan
la diferencia en la Eurocopa pertenecen al equipo de Mourinho
La presencia de Cristiano condiciona el juego de Portugal de la misma manera que también influye en el del Madrid. A ambos cuadros les distingue su fortaleza en las áreas y su facilidad para desplegarse a la contra a partir de vertiginosas transiciones. Nada que ver con el plan de inicio de la selección española, a la que se ha acusado precisamente de ser excesivamente pausada en su fútbol por el exceso de centrocampistas y la ausencia de delanteros. El estilo de La Roja remite habitualmente al del Barça, representado sobre todo por Xavi, Busquets, Iniesta y también por Cesc.
No es ajeno el equipo de Vicente del Bosque al mismo debate que hay en el Camp Nou sobre la ausencia de un nueve, papel que en el azulgrana asume Messi. Pero los 73 goles en 60 partidos que ha totalizado La Pulga en la temporada no le han servido al Barça para ganar la Liga mientras que los 60 de Cristiano le han valido al Madrid para cantar el alirón y a él para aspirar a destronar al argentino en la pugna por el Balón de Oro. Nunca como hasta ahora se había encontrado tan a gusto CR con Portugal, poderosa en el juego físico y directo, y jamás renegó España del sello del Barça, mejorado por el carácter y la determinación de los jugadores del Madrid.
La presencia de Cristiano condiciona el juego de Portugal de la misma manera que también incide en el del Madrid
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