Felipe González se ha casado con su novia, Mar García Vaquero
Su relación se hizo pública a finales de 2008, durante un viaje de la pareja a Latinoamérica
El expresidente del Gobierno Felipe González Márquez contrajo
matrimonio ayer en Madrid con quien ha sido su compañera sentimental
durante los últimos tres años y medio, la economista Mar García Vaquero.
La ceremonia, íntima y familiar, se celebró en la Junta Municipal de
Retiro. La noticia fue confirmada a este periódico por el líder
socialista que, de esta manera, ha querido oficializar la información.
Hace poco más de una semana, algunos medios de comunicación informaron
de que la boda ya se había producido. Sin embargo, el exmandatario
socialista lo desmintió, a la vez que aseguró: “No me he casado, pero el
día que lo haga no lo ocultaré”.
Felipe González no se ha referido nunca a su relación con su ya mujer, que se hizo pública durante un viaje de la pareja por América Latina a finales de 2008. Por entonces, el expresidente del Gobierno todavía estaba casado con la que fue su mujer por 39 años, Carmen Romero, madre de sus tres hijos. Meses después, González no ocultó su noviazgo con García Vaquero, quien a su vez tiene dos hijas, de 24 y 25 años, de su primer matrimonio.
Felipe González es un hombre que siempre ha intentado desligar al máximo su vida personal de la política. Por eso, durante el tiempo en que vivió junto a su familia en el Palacio de la Moncloa, se preocupó de que los suyos ocuparan un papel lo más alejado posible de la representación oficial. Sobre todo en el caso de sus hijos Pablo, David y María. “Ser hijo mío debe ser una putada sangrienta”, le confesó al periodista Juan José Millás en una entrevista en noviembre de 2010. “La verdad es que (los míos) han pasado con un gran esfuerzo lo más desapercibidos posible. Pero el propio esfuerzo para pasar desapercibido significa la dificultad, la dificultad de ser hijo de”.
Mar García Vaquero tiene 50 años, 20 menos que el expresidente del Gobierno. Al igual que para el político, esta es su segunda boda. Antes estuvo casada con el padre de sus dos hijas, un médico de quien se divorció hace más de 11 años. Después de separarse, mantuvo una breve relación con el empresario Luis García Cereceda. Fue a través de este último que conoció a Felipe González. Cereceda entabló una amistad con el exmandatario durante sus años de Gobierno y los tres frecuentaban círculos comunes.
Licenciada en Ciencias Económicas, García Vaquero trabajaba como empleada de la división de banca privada de La Caixa cuando comenzó su relación con el político socialista. Hasta ese momento fue una completa desconocida para los medios de comunicación, a pesar de ser hermana de la mujer del conocido empresario Pedro Trapote, dueño, ente otros negocios, de la discoteca Joy Eslava y la famosa cafetería San Ginés. Pero después de que en 2008 saltara la noticia del inminente divorcio del expresidente con Carmen Romero, la de García Vaquero se convirtió en la imagen más buscada por los fotógrafos en España.
“Felipe y yo nos quitamos las alianzas hace ya 20 años”, confesó más tarde la ya exmujer de González en una entrevista que concedió a la revista Vanity Fair, en marzo de 2009. Sus declaraciones sorprendieron, ya que siempre había intentado mantenerse en un segundo plano como esposa de Felipe González. En la entrevista, publicada en el número de abril de la cabecera de Condé Nast, Romero habló de su nueva vida, pero solo mencionó a su exmarido en aquella frase, que dejó sin especificar. “La discreción ha sido mi fórmula para sobrevivir”, apostilló, eso sí, cuando aceptó referirse al acoso mediático del que estaba siendo objeto en esos momentos, apenas tres meses después de que saliera a la luz el nuevo romance de su exmarido. “Nunca he entrado en comentarios sobre mi vida privada. Prefiero dedicar mi tiempo a otro tipo de literatura”, concluyó.
Fueron unas fotos difundidas por la revista ¡Hola! las que destaparon la relación que ayer se convertía en oficial. En diciembre de 2008 aparecieron en la publicación unas fotografías de González con García Vaquero, obtenidas en el aeropuerto de Punta del Este, en Uruguay. Semanas más tarde, la pareja volvió a ser sorprendida pasando el fin de año en el Caribe. A pesar de que nunca hubo una confirmación oficial, tras aquellas fotos robadas ambos dejaron de esconderse, y poco después empezaron a frecuentar juntos los compromisos sociales del expresidente.
Cómplices se mostraron en el funeral del padre de García Vaquero, en mayo de 2011, y en el de su madre, en febrero de este año. En ambas dolorosas citas, el exjefe del Ejecutivo ejerció públicamente de gran apoyo para su novia. La última vez que aparecieron juntos ante las cámaras fue durante la ceremonia en que González fue nombrado hijo predilecto de Sevilla, el pasado mayo.
Felipe González no se ha referido nunca a su relación con su ya mujer, que se hizo pública durante un viaje de la pareja por América Latina a finales de 2008. Por entonces, el expresidente del Gobierno todavía estaba casado con la que fue su mujer por 39 años, Carmen Romero, madre de sus tres hijos. Meses después, González no ocultó su noviazgo con García Vaquero, quien a su vez tiene dos hijas, de 24 y 25 años, de su primer matrimonio.
Felipe González es un hombre que siempre ha intentado desligar al máximo su vida personal de la política. Por eso, durante el tiempo en que vivió junto a su familia en el Palacio de la Moncloa, se preocupó de que los suyos ocuparan un papel lo más alejado posible de la representación oficial. Sobre todo en el caso de sus hijos Pablo, David y María. “Ser hijo mío debe ser una putada sangrienta”, le confesó al periodista Juan José Millás en una entrevista en noviembre de 2010. “La verdad es que (los míos) han pasado con un gran esfuerzo lo más desapercibidos posible. Pero el propio esfuerzo para pasar desapercibido significa la dificultad, la dificultad de ser hijo de”.
Mar García Vaquero tiene 50 años, 20 menos que el expresidente del Gobierno. Al igual que para el político, esta es su segunda boda. Antes estuvo casada con el padre de sus dos hijas, un médico de quien se divorció hace más de 11 años. Después de separarse, mantuvo una breve relación con el empresario Luis García Cereceda. Fue a través de este último que conoció a Felipe González. Cereceda entabló una amistad con el exmandatario durante sus años de Gobierno y los tres frecuentaban círculos comunes.
Licenciada en Ciencias Económicas, García Vaquero trabajaba como empleada de la división de banca privada de La Caixa cuando comenzó su relación con el político socialista. Hasta ese momento fue una completa desconocida para los medios de comunicación, a pesar de ser hermana de la mujer del conocido empresario Pedro Trapote, dueño, ente otros negocios, de la discoteca Joy Eslava y la famosa cafetería San Ginés. Pero después de que en 2008 saltara la noticia del inminente divorcio del expresidente con Carmen Romero, la de García Vaquero se convirtió en la imagen más buscada por los fotógrafos en España.
“Felipe y yo nos quitamos las alianzas hace ya 20 años”, confesó más tarde la ya exmujer de González en una entrevista que concedió a la revista Vanity Fair, en marzo de 2009. Sus declaraciones sorprendieron, ya que siempre había intentado mantenerse en un segundo plano como esposa de Felipe González. En la entrevista, publicada en el número de abril de la cabecera de Condé Nast, Romero habló de su nueva vida, pero solo mencionó a su exmarido en aquella frase, que dejó sin especificar. “La discreción ha sido mi fórmula para sobrevivir”, apostilló, eso sí, cuando aceptó referirse al acoso mediático del que estaba siendo objeto en esos momentos, apenas tres meses después de que saliera a la luz el nuevo romance de su exmarido. “Nunca he entrado en comentarios sobre mi vida privada. Prefiero dedicar mi tiempo a otro tipo de literatura”, concluyó.
Fueron unas fotos difundidas por la revista ¡Hola! las que destaparon la relación que ayer se convertía en oficial. En diciembre de 2008 aparecieron en la publicación unas fotografías de González con García Vaquero, obtenidas en el aeropuerto de Punta del Este, en Uruguay. Semanas más tarde, la pareja volvió a ser sorprendida pasando el fin de año en el Caribe. A pesar de que nunca hubo una confirmación oficial, tras aquellas fotos robadas ambos dejaron de esconderse, y poco después empezaron a frecuentar juntos los compromisos sociales del expresidente.
Cómplices se mostraron en el funeral del padre de García Vaquero, en mayo de 2011, y en el de su madre, en febrero de este año. En ambas dolorosas citas, el exjefe del Ejecutivo ejerció públicamente de gran apoyo para su novia. La última vez que aparecieron juntos ante las cámaras fue durante la ceremonia en que González fue nombrado hijo predilecto de Sevilla, el pasado mayo.
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