Chávez viaja a Cuba a someterse a un “tratamiento especial”
El Parlamento venezolano autoriza al presidente ausentarse por tiempo indefinido
El presidente venezolano Hufo Chávez. / LUIS ACOSTA (AFP)
El presidente Hugo Chávez viajará de nuevo a Cuba para continuar con el tratamiento médico del cáncer que le fue diagnosticado en junio de 2011 en La Habana.
El Gobierno venezolano no ha precisado la hora de su salida, este
martes, ni la fecha de su regreso, y el tipo de cáncer que padece Chávez
y la gravedad de su enfermedad sigue siendo un misterio en Venezuela.
La información oficial que se tiene al respecto es que ha sido sometido a
tres cirugías y a sesiones periódicas de quimio y radioterapia durante
el último año y que recibirá esta vez “varias sesiones de oxigenación
hiperbárica”.
La noticia del viaje de Chávez la ha dado este martes el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, durante una sesión parlamentaria especial para conmemorar los 20 años del segundo golpe de Estado que intentaron los hombres de Chávez contra el Gobierno de Carlos Andrés Pérez en 1992: “Hemos recibido una comunicación de nuestro compañero, comandante presidente Hugo Chávez y quiero leer esta comunicación”, dijo Cabello. Lo que leyó es lo que sigue: “Cuando se cumplen seis meses de haber concluido la última terapia recibida, se me ha recomendado iniciar un tratamiento especial consistente en varias sesiones de oxigenación hiperbárica, que junto a la fisioterapia sigan consolidando el proceso de fortalecimiento de la salud que he venido experimentando”. En los párrafos siguientes, Chávez pide autorización para ausentarse del país “a partir del día 27 de noviembre del año en curso” y permanecer en Cuba por tiempo indefinido para cumplir con su cronograma de terapias.
El presidente Chávez ya ha estado ausente de la vida de pública del país durante los últimos nueve días. No ha aparecido en televisión, ni ha enviado tuits como solía hacerlo, a través de su cuenta @chavezcandanga. Desde que fue reelecto para un cuarto mandato consecutivo, el 7 de octubre pasado, solo se le ha visto en ocho actos públicos: en la madrugada del 8 de octubre, en un gran acto de masas frente al “balcón del pueblo”, en Palacio de Miraflores, para celebrar su triunfo; luego, en reuniones del Consejo de Ministros y actos políticos, algunos de ellos transmitidas “en cadena” y de forma obligatoria por todos las radios y televisoras del país.
Algunas de sus decisiones más relevantes en la conducción del Gobierno, Chávez las ha informado por teléfono. El día 29 de octubre, informó del nombramiento de un nuevo ministro de Defensa, el almirante Diego Mollero Bellavia, a través de una llamada que fue retransmitida por la estatal Venezolana de Televisión. El acto de investidura del nuevo ministro, que suele realizarse en medio de una ceremonia militar con presencia del Jefe de Estado, ha sido postergado una y otra vez sin que el Gobierno ofrezca una explicación oficial. Lo que se rumora, como ocurre cíclicamente cada vez que Chávez desaparece de la escena pública, es que la salud del comandante no anda bien.
La noticia del viaje de Chávez la ha dado este martes el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, durante una sesión parlamentaria especial para conmemorar los 20 años del segundo golpe de Estado que intentaron los hombres de Chávez contra el Gobierno de Carlos Andrés Pérez en 1992: “Hemos recibido una comunicación de nuestro compañero, comandante presidente Hugo Chávez y quiero leer esta comunicación”, dijo Cabello. Lo que leyó es lo que sigue: “Cuando se cumplen seis meses de haber concluido la última terapia recibida, se me ha recomendado iniciar un tratamiento especial consistente en varias sesiones de oxigenación hiperbárica, que junto a la fisioterapia sigan consolidando el proceso de fortalecimiento de la salud que he venido experimentando”. En los párrafos siguientes, Chávez pide autorización para ausentarse del país “a partir del día 27 de noviembre del año en curso” y permanecer en Cuba por tiempo indefinido para cumplir con su cronograma de terapias.
El presidente Chávez ya ha estado ausente de la vida de pública del país durante los últimos nueve días. No ha aparecido en televisión, ni ha enviado tuits como solía hacerlo, a través de su cuenta @chavezcandanga. Desde que fue reelecto para un cuarto mandato consecutivo, el 7 de octubre pasado, solo se le ha visto en ocho actos públicos: en la madrugada del 8 de octubre, en un gran acto de masas frente al “balcón del pueblo”, en Palacio de Miraflores, para celebrar su triunfo; luego, en reuniones del Consejo de Ministros y actos políticos, algunos de ellos transmitidas “en cadena” y de forma obligatoria por todos las radios y televisoras del país.
Algunas de sus decisiones más relevantes en la conducción del Gobierno, Chávez las ha informado por teléfono. El día 29 de octubre, informó del nombramiento de un nuevo ministro de Defensa, el almirante Diego Mollero Bellavia, a través de una llamada que fue retransmitida por la estatal Venezolana de Televisión. El acto de investidura del nuevo ministro, que suele realizarse en medio de una ceremonia militar con presencia del Jefe de Estado, ha sido postergado una y otra vez sin que el Gobierno ofrezca una explicación oficial. Lo que se rumora, como ocurre cíclicamente cada vez que Chávez desaparece de la escena pública, es que la salud del comandante no anda bien.
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