viernes, 14 de diciembre de 2012

La mujer que quedó tuerta por una bala de goma

Ester Quintana pide más testigos para que se “haga justicia”

La mujer perdió un ojo en los altercados de la huelga general del 14-N en Barcelona

Su abogada asegura que los médicos ven compatible la herida con el impacto de un proyectil

Acompañada de su abogada, y visiblemente emocionada, Ester Quintana ha comparecido hoy por primera vez ante los medios después de que el pasado 14 de noviembre perdiese un ojo por el impacto de algún tipo de proyectil. Quintana está convencida de que fue un mossos quien la hirió y por eso ha presentado una querella. Después de ratificar su denuncia ante el juzgado de instrucción número 11 de Barcelona y de prestar declaración, ha agradecido el apoyo a todos los ciudadanos que le han mostrado su apoyo y les ha pedido ayuda "para aportar testigos y pruebas". "Por favor, no dejen de hacerlo, se tiene que hacer justicia", ha dicho.
La mujer ha aportado diversos vídeos y testimonios al juzgado para demostrar que un proyectil disparado por los antidisturbios la hirió gravemente. Según su abogada, Laia Serra, los médicos han indicado que el tipo de lesión que presenta suele producirla algún tipo de proyectil, aunque ha matizado que aún es pronto para poder determinarlo. A la mujer aún no la ha visto un médico forense que pueda indicar con exactitud qué le causó la incisión que le ha hecho perder el ojo.
El consejero de Interior, Felip Puig, mantiene que a Quintana no la hirió ningún disparo de mossos. El departamento se ha visto obligado a dar tres versiones distintas de las cargas que ocurrieron el 14-N en Barcelona. Inicialmente, Puig aseguró que donde resultó herida la mujer no hubo actividad policial. Diversos vídeos y un posterior informe han demostrado que los agentes dispararon hasta siete veces. Puig aceptó ayer la dimisión del máximo responsable de los antidisturbios, el comisario Sergi Pla.
A eso se suman otras imágenes nuevas, hechas públicas ayer, que indican que en las inmediaciones de paseo de Gràcia, donde resultó herida Ester, pudo haberse disparado un octavo proyectil. Aunque Interior asegura que la cifra definitiva de pelotas de la lanzadera disparadas es de 62 y que, por tanto, solo puede tratarse de un error en la percepción de un escopetero del lugar en el que disparó, pero no de un nuevo tiro. Y menos de uno que hubiese herido a Quintana.
En los próximos días, la defensa de la mujer presentará nuevos vídeos y testigos para probar la tesis de que la hirió una pelota disparada por la policía catalana. Interior está revisando todas las imágenes para saber qué le ocurrió a Quintana.

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