Monarquía sostenible
Por: Pablo León
El hijo de Lady Di se casa. Y muchos medios llevan semanas especulando sobre pamelas, tacones, invitados y demás hits de la crónica social. Detalles que, normalmente, en el casamiento de un colega, familiar o amigo nos agotarían, en el regio evento no solo interesan a propios y extraños sino que hasta es motivo de debate. Mientras que las bodas personales saturan, las bodas reales (parece que) interesan. El enlace ha generado marchas republicanas, condones conmemorativos y debates sobre la sucesión. Casi nada.
Eso en el terreno público, en el espacio privado los invitados, además de preocuparse de la alfombra roja que supone el atávico recorrido a las puertas de Westminster Abbey, han tenido que pensar en regalos. "¿Qué se le puede regalar a un príncipe? ¿Qué necesita un regio heredero?" , se habrán preguntado muchos de los invitados. El alcalde de Londres lo ha tenido claro y les ha regalado un tándem para que la pareja pasee en bici y marquen el futuro de una monarquía sostenible.
El hashtag de Twitter Royal Wedding by bicycle no ha tenido mucho éxito. Hubiese sido un filón para London Cycle Chic. A pesar de la falta de compromiso con los pedales de los invitados, los cortes de tráfico en los alrededores del recorrido de la marcha nupcial han supuesto un soplo de aire para muchos londinenses bicicleteros que han podido disfrutar de la capital casi sin coches. Al fin y al cabo, aunque no estuvieran invitados, ellos también han pagado parte de la boda y gracias a ella van a tener un día más de vacaciones.
Hoy es el día y la Reina lo twitea todo. Sabe que la boda supone un soplo de aire fresco a la monarquía británica. Tras los sustos que les dio Diana de Gales (Lady Di era la Madonna de la realeza), Queen Elizabeth quiere que su nieto Guillermo sea reconocido pero dócil, un Justin Bieber de la monarquía. El evento ha generado reacciones de todo tipo, también en el mundo de las bicis.
Además del tandem que Boris Johnson ha regalado a la pareja real, el artista alemán El Diablo ha creado una bici especial para el evento y la web se ha llenado de tutoriales para ver la boda en bici o para evitarla a toda costa a pedales. En Guardian hay una selección de actividades alternativas. Creo que se van a dar el sí. Me voy a dar una vuelta con la bici.
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