Patxi López: “Nuestro viejo partido se está convirtiendo en un partido viejo”
Afirma que va a acometer una profunda reforma de "ideas y de personas" en el PSE
El País
Bilbao
30 OCT 2012 - 20:24 CET72
El líder del PSE-EE, Patxi López, ha sido hoy taxativo al hablar del PSOE tras los resultados del 21-O,
que han descabalgado a los socialistas del poder en Euskadi y han
supuesto un varapalo para este partido en Galicia. "Hoy nuestro viejo
partido se está convirtiendo en un partido viejo", ha dicho después de
anunciar que tiene previsto acometer una profunda reforma "de ideas, de
propuestas, de organización y de personas" en la formación vasca que
preside. López ha transmitido este compromiso en su intervención ante el
Comité Nacional del PSE reunido en un hotel de Bilbao para analizar los
resultados de los comicios vascos y avanzar cuál debe ser el futuro del
partido. "No estamos consiguiendo que nueva gente se involucre en el
proyecto socialista", ha dicho López, quien en ningún momento ha hablado
explícitamente del PSOE federal ni de Alfredo Pérez Rubalcaba.
"Es necesario un cambio profundo, de ideas, de propuestas, de organización y de personas", ha asegurado López, quien ya ha confirmado que se presentará a la reelección como líder del PSE, puesto que ocupa desde 2002, en el próximo congreso, previsto para comienzos del año que viene.
Tras el mal resultado de las recientes elecciones vascas, en las que los socialistas han perdido más de 100.000 votos y nueve escaños, López ha reconocido que la organización del partido y "partes" de su discurso político "se están quedado en algunos aspectos caducas". "Si la organización del Partido se está quedando, en algunos aspectos, caduca; con el discurso político nos está pasando lo mismo", ha dicho exactamente.
López ha hecho extensivos los problemas del PSE a los del PSOE que encabeza Alfredo Pérez Rubalcaba: "Hoy, nuestro viejo partido se está convirtiendo en un partido viejo", ha dicho. En alusión al sector crítico del PSE de Álava, López ha afirmado que "es tiempo de unidad, no de enfrentamientos internos, ni del protagonismo individual que busca minutos de gloria".
A juicio del aún lehendakari, el partido se ha convertido en "una organización que se está encontrando con límites que no puede traspasar. No estamos consiguiendo que nueva gente se involucre en el proyecto socialista". Para romper esos límites, apuesta por abrir el partido para "permitir la participación de los progresistas de este país".
El secretario general del PSE ha hecho un llamamiento a los cargos del partido para volcarse con la ciudadanía: "Menos despachos, menos burbujas, menos encierros y más calle, que para eso hemos recuperado la libertad". Lo que, a su entender, va a llevar a la gente a sumarse al proyecto socialista es la creación de un discurso que "dé coherencia", un "relato político" de qué tipo de "sociedad, vida y futuro" plantean los socialistas a los ciudadanos. "Sin eso, sin un discurso que nos dé coherencia, de nada sirve la organización", ha subrayado.
"Es necesario un cambio profundo, de ideas, de propuestas, de organización y de personas", ha asegurado López, quien ya ha confirmado que se presentará a la reelección como líder del PSE, puesto que ocupa desde 2002, en el próximo congreso, previsto para comienzos del año que viene.
Tras el mal resultado de las recientes elecciones vascas, en las que los socialistas han perdido más de 100.000 votos y nueve escaños, López ha reconocido que la organización del partido y "partes" de su discurso político "se están quedado en algunos aspectos caducas". "Si la organización del Partido se está quedando, en algunos aspectos, caduca; con el discurso político nos está pasando lo mismo", ha dicho exactamente.
López ha hecho extensivos los problemas del PSE a los del PSOE que encabeza Alfredo Pérez Rubalcaba: "Hoy, nuestro viejo partido se está convirtiendo en un partido viejo", ha dicho. En alusión al sector crítico del PSE de Álava, López ha afirmado que "es tiempo de unidad, no de enfrentamientos internos, ni del protagonismo individual que busca minutos de gloria".
A juicio del aún lehendakari, el partido se ha convertido en "una organización que se está encontrando con límites que no puede traspasar. No estamos consiguiendo que nueva gente se involucre en el proyecto socialista". Para romper esos límites, apuesta por abrir el partido para "permitir la participación de los progresistas de este país".
El secretario general del PSE ha hecho un llamamiento a los cargos del partido para volcarse con la ciudadanía: "Menos despachos, menos burbujas, menos encierros y más calle, que para eso hemos recuperado la libertad". Lo que, a su entender, va a llevar a la gente a sumarse al proyecto socialista es la creación de un discurso que "dé coherencia", un "relato político" de qué tipo de "sociedad, vida y futuro" plantean los socialistas a los ciudadanos. "Sin eso, sin un discurso que nos dé coherencia, de nada sirve la organización", ha subrayado.
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