Si hay algo que caracteriza a Madonna es que siempre ha vivido ajena a las críticas que suscita. Provocadora, irreverente, decidida y arriesgada, la «Reina del Pop» no sólo llama la atención sobre los escenarios, sino también en su vida privada.
Desde que se divorció de su marido Guy Richie, la artista ha tenido tiempo para muchas cosas: para seguir empujando su carrera con nuevos éxitos, para adoptar dos hijos y para volver a creer en el amor.
Lo curioso del caso es que la rubia encadena un jovencito tras otro: ella, que supera los 50, los prefiere veinteañeros. Y cada día está más joven. Madonna no quiere hacerse vieja y encuentra en cada uno de sus «boy toys» («chicos de juguete») una fuente de renovada juventud. Porque junto a un yogurín una no se puede permitir achaques, licencias en la línea o bajar el ritmo.
«Cougars» frente a Playboys
Aunque no muchos lo critican en en voz alta (como sí lo ha hecho el hermano de la cantante, tachando su actitud asaltacunas de «repugnante»), no está bien visto que una mujer caiga en los brazos de un chico que podría ser su hijo. No obstante, Madonna cuenta con algunas «cougar» («pumas», en inglés, como se conoce a estas mujeres) famosas, como Demi Moore o Halle Berry.
Pero hay ciertas razones que pueden desvelar estas relaciones con tanta diferencia de edad. Para empezar, sería conveniente Se ve bien que Harrison Ford o Michael Douglas tengan parejas jóvenes y choca que Madonna salga con jovencitos plantearse por qué tachan el estilo de vida amorosa de Madonna como inapropiado en el «star system», mientras la situación contraria -hombres mayores con jovencitas- está mucho más extendida. Y si no, véase los ejemplos de hombres como Harrison Ford o Michael Douglas... e incluso el patrio Julio Iglesias han hecho lo mismo sin cosechar tantas críticas.
Y es que una vez que se buscan las razones de la atracción de Madonna por los jóvenes -tales como su ex Jesús Luz (24) o su actual novio Brahim Zaibat (24)-, ésta parece estar siendo totalmente coherente con su estilo de vida y sus convicciones.
Para empezar, una estrella del estatus de Madonna -la Reina del Pop- no podría tener a su lado «a alguien que no supiera mantenerse en un discreto segundo puesto», dice la experta en relaciones Gilda Carle a Popeater. Y los jóvenes «en este caso son mucho más maleables y adaptables a este tipo de situaciones», añade.
Nada de millonarios
Además, no es que Madonna necesite a un millonario a su lado que la mantenga. Lo que ella busca no es una relación que le provea además de seguridad económica, pues con su propia fortuna tiene suficiente y puede emplear el tiempo libre en divertirse con quien más le gusta.
Y parece lógico que aquellos que más le atraigan sean precisamente los jóvenes, con un físico para ella más apetecible, y que además pueden seguir su exigente ritmo de vida sin agotarse.
Porque Madonna no sólo viaja, diseña y desarrolla tareas como empresaria. También es aficionada a los deportes, y el hombre que vaya a estar a su lado debe tener suficiente forma física para todo ello y para rendir además en la cama, una cuestión a la que la artista reconoce conceder mucha importancia. "Madonna es bellísima, poderosa y muy abierta en cuanto a su sexualidad.
Entiendo perfectamente por qué le gusta ser una 'asaltacunas', los hombres jóvenes tienen un increíble sex appeal", sentencia la experta en relaciones Tracey Steinberg al mismo medio.
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