El presidente de los obispos italianos, el cardenal Angelo Bagnasco, ha dicho este lunes que la sociedad asiste «apesadumbrada» al escándalo de índole sexual en el que está envuelto el primer ministro, Silvio Berlusconi, y que se respira un evidente «problema moral».
Bagnasco hizo estas manifestaciones en Ancona ante el Consejo Permanente de la Conferencia Episcopal Italiana, donde trató, como había anunciado el pasado día 21, el llamado «caso Ruby», en referencia a la mujer marroquí con la que supuestamente Berlusconi habría mantenido relaciones sexuales cuando ella aún era menor de edad.
Sin nombrar directamente al primer ministro italiano, Bagnasco ha indicado que en los últimos días se están multiplicando noticias sobre «comportamientos contrarios al decoro público y se exhiben muestras -verdaderas o falsas- de estilos no compatibles con la sobriedad y la corrección». El cardenal ha exigido «sobriedad, disciplina y honor» a todos los que tienen un «mandato político».
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