domingo, 15 de mayo de 2011

La Brenda en La Antigua/cuento corto.

Santo Domingo del Cerro.

Uno de mis problemas más difíciles de controlar, es esa necesidad de "educar" a mis parejas, a todas las quiero pulir como si fueran diamantes en bruto. Pero la paradoja, es que ellas no quieren ser educadas por mi, ni se consideran diamantes de muchos quilates.

Con La Brenda la lucha ha sido intensa desde que la conocí. Ella de entrada se burló de mi por tener tantos estudios y ganar tan poco como director de una facultad de psicología. " Mi vida, yo no tengo estudios universitarios y gano una fortuna; lo que tu ganas en un año yo lo obtengo en un mes."

Tenía razón en su dicho, me dolió pero era verdad, mi erudición no era rentable en términos económicos.

Hoy me ocurrió lo mismo de siempre. Llevo a La Brenda a La Antigua con el propósito de mostrarle la historia viva de sus ruinas, de una ciudad colonial que fue la Capitanía General, y que fue destruida por un violento terremoto, dejando todo por los suelos hasta la fecha de hoy.

Recorremos las ruinas de las iglesias y constatamos las restauraciones preciosas que se han realizado en la mayoría de ellas.

La Brenda bosteza sin cesar. Y me insinúa, ¿no se te antoja un trago o una cerveza bien fría? Yo acepto de inmediato, ya la atosigué con tantos datos históricos, y la quiero complacer y me la llevo a la Posada de Don Rodrigo, para que escuche la marimba tradicional de este país. En ese sitio almorzamos y bebemos varias cervezas Gallo. Ella tiene más aguante que yo, ella es una gran bebedora social. Eso me molesta demasiado, porque ella sabe perfectamente que su bipolaridad se agudiza con alcohol de por medio. pero no hace caso.

Para darle un sabor especial a la despedida de La Brenda al país, yo dispuse que la "cereza del pastel" sería una visita a Santo Domingo del Cerro.

Santo Domingo del Cerro, es un lugar especial para la celebración de actividades sociales, especialmente de la clase acomodada de Guatemala. Por lo que el lugar es especialmente elegante en sus condiciones e instalaciones; me dice La Brenda: mi amor, que te parecería si nos casáramos en este sitio.

El cerro es una montaña arbolada y muy cuidada desde el punto de vista ecológico. Es una extensión comercial del hotel Santo Domingo, uno de los más elegantes de La Antigua.

Me emociono con el proyecto del cerro, porque es un típico producto de una arquitectura de paisaje, al mejor estilo de Inglaterra. Le explico esto a La Brenda, y ella me mira detrás de sus gafas de sol, pero no alcanzo a advertir el significado de sus ojos verdes. A lo mejor hizo bizco y no me di cuenta.

Santo Domingo del Cerro es un proyecto ambicioso, que quiere resaltar los valores artísticos nacionales. Hay esculturas de diversos materiales, bustos de personajes literarios e históricos. Muchos detalles bien cuidados, con buen gusto.

Finalmente, La Brenda y yo terminamos acomodados en bancos altos de madera, con vista panorámica de la ciudad colonial,y con dos vasos de whisky en las manos, y varios hielos para apaciguar la sed.

La sesión de alcoholes continuó durante varias horas, hasta que nos echaron del lugar por que ya iban a cerrar el bar.

Caminamos tomados de la mano por varios senderos del cerro. La inquietud de La Brenda durante la caminata fue en torno a nuestro futuro amoroso.

Quedamos en seguir amándonos intensamente y volver a encontrarnos muy pronto, ahora me toca a mi, ir a verla a México.

El tema de volver a vivir juntos queda pendiente de resolverse en el mediano plazo.

Con ella me ocurre lo siguiente: no puedo vivir con ella, pero tampoco puedo vivir si ella.

Por eso nos encontramos frecuentemente en cualquier parte del mundo, y nos amamos como si fuera la primera vez.

Antes de abandonar Santo Domingo del Cerro, le comento: fíjate que este proyecto de arquitectura del paisaje que tu y yo disfrutamos, lo hizo el arquitecto Giracca.

! Ah ¡ exclamó ella sin convicción. Cerró los ojos y se durmió profundamente y yo me dispuse a tomar el volante de la camioneta e insertar un compac disk de mi música favorita: Mozart

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