lunes, 27 de septiembre de 2010

La misteriosa Aura Marina.

Hace unos dos meses apareció en mi facebook un mensaje de Aura Marina, a quien no conozco ni me suena su nombre, diciéndome que quería ser mi amiga, solicitud hecha de manera atenta y respetuosa, a lo cual accedí.

De inmediato abrí mi facebook y me puse a buscar a la tal Aura Marina, no hay muchas mujeres con ese nombre, pero por fin pude dar con ella, pero para mi decepción su página no aporta ningún detalle personal de ella. En lugar de su fotografía, el espacio es ocupado por un dibujo de la "mujer maravilla", eso aumenta mi curiosidad por saber quién es en realidad la tal mujer maravilla.

Hombre curioso que soy desde niño, la aparición en mi vida de Aura Marina, me intriga y me emociona al mismo tiempo, por que quiero saber su identidad real. El facebook se presta magníficamente para esconder personalidades e identidades verdaderas.

No hay día o noche, desde hace dos meses, en que no encuentre un mensaje de la misteriosa Aura Marina en mi facebook. Todos los mensajes, bien escritos y redactados hasta con elegancia, eso me entusiasma más aún. Pero el contenido de los mensajes es abiertamente seductor y cachondo. Al punto que muchas veces al abrir el mensaje, me ruborizo al leer tantas frases directas al corazón, ella sabe o me conoce por las cosas que me dice, intuyo que es alguna amiga o compañera de la universidad.

El juego se ha convertido en una auténtica obsesión para mi, agradable sí, e inquietante por carecer de un rostro legible. Siempre había estado del lado del seductor activo, el que toma la iniciativa, ahora todo es distinto. "El cazador está siendo cazado", vaya paradoja de la vida, a mis años.

Ya estoy atrapado entre las sutiles redes de la seducción que se han ido tejiendo amorosamente a lo largo de los días, y que yo he permitido aceptar con cierto gozo.

Ya no duermo como antes, ahora me cuesta trabajo conciliar el sueño, o bien me levanto súbitamente a la madrugada en búsqueda de esos ricos mensajes que ella me deja en la computadora, y sí, ahí están sin falta esas bellas palabras que ella me dedica.

Además los mensajes vienen, casi siempre, acompañados de sugerencias o links referidos a música y videos, que me remiten a viejas épocas o al romanticismo de siempre. Sabe elegir las canciones de los viejos tiempos, esas que solo hablan de amor.

Debo confesar: he caído redondo en los brazos de una bella e inteligente mujer que no conozco, pero que me ha podido seducir de maneras diversas y novedosas.

Hoy fui presuroso a comprar una cámara para instalarla en mi vieja computadora y estar listo para cuando ella acepte ingresar al sistema de Skype, y por fin podamos vernos directamente a los ojos. Esa posibilidad de un encuentro virtual me fascina y me emociona profundamente.

Ya le advertí de la compra de la cámara, último modelo, cara pero vale la pena tenerla por si acaso Aura Marina me honra con su imagen real.

Algunos puntos que he podido establecer para que la confianza en esta misteriosa dama no se diluya, como un amor líquido, son algunos detalles que he podido descubrir: los mensajes vienen de México, Distrito Federal; y ella conoce algunas amigas mías de mis tiempos de periodista en La Jornada.

El temor que suscita este tipo de relaciones en la Red, es que uno puede ser objeto de un juego perverso.

En primer lugar, aclaro que sí es mujer.

En segundo lugar, ella sabe quien soy yo.

En tercer lugar, supo cómo seducirme con las canciones y poemas que me envía cotidianamente.

Mi página en facebook "es un libro abierto", no hay nada que esconder, ese soy yo, y aunque tengo nombre de seudónimo, así me llamo.

La misteriosa Aura Marina me conduce a los laberintos del amor y del romanticismo más tradicional, a lo cual yo accedo gustosamente. Acepto la aventura, siempre me ha gustado arriesgar mucho para conocer y disfrutar de la vida.

Mis tareas de escritor se han perturbado demasiado por atender las provocaciones de Aura Marina, a quien no puedo dejar de prestar atención a sus palabras y a sus cantos de sirena.

Siempre he dicho: El ser humano no muere cuando deja de vivir, pero si cuando deja de amar.

Estoy vivo, creo que la amo.

2 comentarios:

  1. A punto estaba de apagar la computadora para ir a prepararme para el preambulo del sueño; parte del día que me facina...cuando ví tu escrito sobre Aura Marina.

    Transmites (te tuteo por contemporáneo) perfectamente la ilusión que te regala el coqueteo diario con Aura Marina. Bonito nombre tiene ella. Te hará sentir más vivo toda esa atención. Bonita sensación esa la de saberse especial para alguién más. Me parece que es algo que hay que disfrutarlo y verlo en su justa dimensión tal cual pareces verlo tu.

    Felicidades Bolivar por tu alegría de vivir.

    Mañana, si me acuerdo, quiero comentar sobre esa mujer iraní de la que hablas.

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  2. Esta historia tiene esa magia que involucra a seguirla cada día con ilusión de saber su desenlace. La facilidad para armarlas, entretejerlas es tan fluido en tu pluma que difícilmente pensaríamos que no es algo que sucede, que esta allí, que emociona. Siempre quisiéramos un final feliz así que en esta, esperemos que lo tenga. Continuará?
    Leo el comentario anterior y yo diría que vivas tan solo el encanto del momento. No hay vida si no hay emociones que nos muevan.

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