Hoy se inicia el primer Congreso Internacional La experiencia intelectual de las mujeres en el siglo XXI, proyecto que desde hace varios meses se ha venido gestando en el Conaculta. “Uno de los propósitos del proyecto cultural del siglo XXI es hacer de México una de las plataformas intelectuales del español, es intentar que muchas de las cosas que se digan en el mundo en nuestro idioma se expresen aquí. El objetivo de este congreso es construir un diálogo profundo y sensible sobre el presente y futuro de la mujer en nuestra sociedad. El congreso se propone ir más allá de lo feminista.
La génesis de estas conferencias en el contexto del Día Internacional de la Mujer remite al quinto Congreso Internacional de la Lengua Española que iba a celebrarse en Valparaíso, Chile, y que debido al terremoto ocurrido en esa ciudad se canceló. México, a través de la Feria del Libro de Guadalajara, invitó a que el pasado diciembre estuvieran reunidos 22 representantes de las academias del español.
Rememora Sáizar: “Cuando nos reunimos era muy notoria la falta de mujeres. Y de ahí surgió la idea de convocar a las mujeres que hablan español, que son reconocidas tanto en sus países como fuera de ellos, para que dialoguen sobre si se está desarrollando un pensamiento propio en nuestro idioma”.
Con la participación de 50 mujeres que han destacado en distintos ámbitos de la cultura nacional e internacional, Sáizar, en un tono optimista, espera “encontrar el pensamiento original que se está generando en diversas latitudes y que podamos, de alguna manera, articular una conversación inteligente con mujeres destacadas, que seamos capaces de convocar a las nuevas generaciones para que imaginen un futuro mucho más pleno y más ambicioso que traspase la condición del ser mujer”.
Asegura estar convencida de que muchos de los logros que se van a tener en el congreso son insospechados. “Recuerdo aquel encuentro de jóvenes estudiantes en Argentina, en donde Daniel Cossío Villegas conoció a Arnaldo Orfila. En este tipo de congresos, en donde se favorecen las amistades inimaginables, es donde se generan los proyectos culturales que trascienden fronteras. Años después, Cossío Villegas invitó a Arnaldo Orfila a que fuera director del Fondo de Cultura Económica (FCE) al rememorar aquel encuentro de jóvenes, ávidos lectores, que llegarían a ser grandes figuras del mundo editorial. Ese es el sueño, es la misión y, digamos, el propósito”.
Mujeres en la cultura
La administración de Consuelo Sáizar se ha caracterizado por el espacio que le ha brindado a las mujeres. “No podía hacer menos”, enfatiza. “En el FCE me tocó bautizar la primera librería con nombre de mujer. Hemos auspiciado la promoción de las funcionarias públicas. Desde el FCE y en el Conaculta hemos dado la plataforma para que puedan publicarse textos de enorme talento”. Al preguntarle hasta dónde están los límites entre la capacidad y el hecho de ser mujer, responde: “Cada quien encontrará su espacio más allá del género. Dependiendo de su talento. Esa posibilidad de logro y de realización precisamente no queda condicionada por el género”.
Respecto a la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, indica: “A mí me gustaría que todos los días del año hubiera una celebración de la condición femenina con enormes posibilidades de aportación personal, de interlocución colectiva y de un pensamiento que le sea útil a la sociedad”.
Entre las invitadas al primer Congreso Internacional “La experiencia intelectual de las mujeres en el siglo XXI” se encuentran las editoras Ofelia Grande de Andrés (España), Teresa Milawer (Estados Unidos); las periodistas Leila Guerrero (Argentina) y María Teresa Ronderos (Colombia); las historiadoras Josefina Zoraida Vázquez (México), Asunción Lavrin (Estados Unidos) y Marcela Ternavasio (Argentina); así como politólogas, artistas plásticas, cineastas, arquiectas, científicas y escritoras. Las 14 mesas de discusión se transmitirán por televisión (Canal 22 y TvMujeres 159 de Cablevisión), radio y redes sociales.
Gabriela Cano, académica, especialista en feminismo, se encargará de integrar las ideas y críticas, tanto del público como de las participantes. Será la ombudswoman.
—¿Cuál es el logro de la mujer en el siglo XXI?
—No me atrevería a decirlo. Sin embargo, aventurando una posible respuesta creería que es reconocerse como alguien que puede generar un pensamiento propio capaz de servir a la sociedad
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