Es todos conocidos ese maridaje clandestino, bajo el agua, entre las compañías farmacéuticas y el gremio médico. Los grandes consorcios internacionales dedicados a la fabricación de medicamentos, saben que su éxito depende que los médicos "recomienden" sus productos a los pacientes u hospitales y sanatorios privados.
Los médicos saben muy bien, que a veces ese medicamento que deben recomendar al paciente, no es el mejor o el indicado para ese padecimiento, y sin embargo lo recetan con una falta de ética, evidente.
Las farmacéuticas no son el enemigo, pero no cabe duda de que tienen intereses comerciales y lucrativos que chocan con la importancia de poner el beneficio del paciente por encima de todo, tal y como prometen los médicos en el juramento hipocrático. A pesar de este conflicto de intereses, muchos doctores siguen manteniendo lazos con la industria tal y como refleja un nuevo estudio.
Las relaciones entre la industria farmacéutica y los médicos, en forma de regalos, invitaciones a congresos o pagos por dar charlas o hacer revisiones, son un tema controvertido y un fenómeno que puede comprometer el buen desempeño de la profesión médica. Por eso, desde hace años, países como EEUU se preocupan por limitar y hacer lo más transparentes posible estos vínculos.
Los esfuerzos se han realizado a nivel privado -nuevos códigos éticos de los colegios médicos, normas específicas impuestas por hospitales y compañías de salud a sus trabajadores- y en el país, sobre todo con el Physician Payment Sunshine Act, una ley que estipula la creación de un sistema nacional para revelar las relaciones industria-médicos. Sin embargo, a pesar de estas medidas, una amplia mayoría de los colegiados estadounidenses recibe dinero de las farmacéuticas.
Eric Campbell, del Hospital General de Massachusetts, y sus colegas publican en el último número de la revista 'Archives of Internal Medicine' un análisis de la situación del país americano. Los resultados se basan en una encuesta realizada a 3.500 especialistas en referencia a sus actividades durante 2009, un cuestionario similar al que hicieron los autores en el año 2004.
"En cada medida realizada, el porcentaje de médicos con relaciones con la industria era significativamente menor en 2009 que en 2004", señala el estudio. Había menos médicos que recibían regalos (83% frente al 71%) o muestras gratuitas de fármacos (78% frente al 64%). También habían disminuido las asistencias subvencionadas a congresos -así como el número de estas reuniones- y las colaboraciones profesionales.
Pero, a pesar de que las cifras eran mejores que un lustro antes, el 84 por ciento de los médicos mantenía lazos con el poderoso sector farmacéutico, uno de los que más invierte en publicidad y márketing de todo el mercado (alrededor del 30 por ciento del presupuesto). Relaciones que, como revelaba un estudio publicado en 'Archives of Surgery', son vistas por los profesionales de la medicina como "nada inapropiado", a pesar de que, como constatan varios análisis, influye en qué medicamentos se prescriben.
Por eso, tal vez, los autores buscan razones ajenas a los galenos para explicar este descenso. La mayor atención prestada al tema por los medios y el público en general, las nuevas políticas de transparencia e, incluso, el efecto de la crisis sobre las cuentas de las empresas y su ahorro en ciertas actividades, como las publicitarias, podrían haber influido en la tendencia a la baja registrada.
En España, no hay cifras acerca de estas relaciones. Una pequeña encuesta realizada en centros de Atención Primaria catalanes en 2005 reveló que el 44 por ciento de los médicos recibía a los visitadores entre dos y tres veces por semana y el 87 por ciento consideraba necesario este contacto. La Organización Médica Colegial advierte de que el médico no debe prescribir bajo presiones sino basándose en criterios de coste-eficacia.
Los derechos de los pacientes, prácticamente, no se respetan. Estamos en manos del contubernio entre laboratorios farmacéuticos y médicos. Si Hipócrates viviera, se vuelve a morir en el mismo instante en que descubriera lo que han hecho de su juramento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario