Los periodistas protestan en México para exigir seguridad
A un año del asesinato de la corresponsal de Proceso Regina Martínez, el semanario pide que se esclarezca el caso
Periodistas realizan una protesta en Guadalajara (México). / ulises ruiz basurto (efe)
A la periodista mexicana Regina Martínez la golpearon y la estrangularon hasta asfixiarla. Hace hoy un año, la corresponsal del semanario Proceso,
en Veracruz, era hallada muerta en el baño de su casa. Ya antes la
habían amenazado, pero el Gobierno del Estado no hizo nada por
protegerla. Este miércoles Daniel Alejandro Martínez Baldazúa,
fotógrafo del conocido diario Vanguardia, de Coahuila, y cuyo cuerpo
fue encontrado mutilado, se sumaba a lista de víctimas de profesionales
de los medios. Igual que Jaime Guadalupe Domínguez, director de un
portal de internet de la ciudad de Ojinaga, en Chihuahua, asesinado a
tiros en marzo.
Por todo lo anterior, y por más, este domingo, periodistas y fotógrafos de 14 ciudades de distintos Estados del país salieron a la calle para exigir el fin de los asesinatos de comunicadores y de la impunidad de estos crímenes.
Marcela Turati, miembro de la red Periodistas de a Pie y reportera de Proceso, participó en la marcha en Xalapa, la ciudad de Veracruz donde asesinaron a Martínez. “Hemos venido varios periodistas del Distrito Federal para ayudar aquí a los compañeros a romper el miedo”, asegura en conversación telefónica.
Seis meses después del asesinato de la periodista, la fiscalía de Veracruz presentó a Jorge Antonio Hernández Silva como presunto homicida y aseguró que el móvil del crimen fue un robo. El sospechoso fue sentenciado a 38 años de prisión a pesar de que en una audiencia pública denunció haber sido torturado para confesar. Proceso reiteró la postura que tuvo desde que ocurrió el crimen. “No creímos entonces que [las autoridades] esclarecerían el asesinato y no les creemos ahora que han juzgado a quien no se puede defender”, denunció. La sentencia fue apelada en las cortes y el caso sigue abierto. Hace unos días, el semanario alertó de las coacciones al reportero Jorge Carrasco, encargado de investigar el caso. El Gobierno le negó protección oficial, por lo que la revista publicó un artículo incendiario contra Javier Duarte, el presidente de Veracruz.
Bajo el lema “El autoritarismo no callará nuestra voz. Justicia para Regina Martínez a un año del crimen de Estado: no les creemos”, el acto de este domingo en Xalapa, que contó con la presencia del escritor Juan Villoro y unos 200 manifestantes, reivindicó el esclarecimiento de los hechos y reiteró la demanda de justicia.
“Nos hemos encontrado con compañeros que debieron salir de Veracruz durante un tiempo por amenazas y con otros que han sido llamados a no marchar, con lo que se arriesgan a perder sus puestos de trabajo”. En este sentido, Turati asegura que varios periodistas han recibido la petición expresa de no adherirse a la protesta desde el departamento de comunicación social del propio Estado.
Veracruz está considerada la región más peligrosa para ejercer el periodismo en México. Entre mayo de 2011 y junio de 2012, nueve profesionales de los medios de comunicación han sido asesinados y tres han desaparecido. Pese a ello, a comienzos del mes de abril,la Asociación Mexicana de Editores de Periódicos entregó a su gobernador, Javier Duarte, un premio por la defensa de los periodistas. Varios diarios se deslindaron de ese galardón, airadamente protestado en las redes sociales y en algunos medios.
La Comisión Nacional de Derechos Humanos señala que desde el año 2000 81 periodistas han sido asesinados en México. Aunque las cifras varían de unos organismos a otros, la asociación Artículo 19 denuncia en el informe del primer trimestre de 2013 que se registraron durante este período 50 ataques, lo que representa un 20% más que el año anterior. La persecución a la prensa se recrudeció a partir de 2006, cuando el presidente Felipe Calderón declaró la guerra contra el narcotráfico. Los dos asesinatos de este año, las desapariciones, los secuestros y múltiples ataques contra las sedes de medios ocurridos en lo que va de 2013 no parecen indicar que la tendencia vaya a revertirse con la llegada de Enrique Peña Nieto a la presidencia mexicana.
Por todo lo anterior, y por más, este domingo, periodistas y fotógrafos de 14 ciudades de distintos Estados del país salieron a la calle para exigir el fin de los asesinatos de comunicadores y de la impunidad de estos crímenes.
Marcela Turati, miembro de la red Periodistas de a Pie y reportera de Proceso, participó en la marcha en Xalapa, la ciudad de Veracruz donde asesinaron a Martínez. “Hemos venido varios periodistas del Distrito Federal para ayudar aquí a los compañeros a romper el miedo”, asegura en conversación telefónica.
Seis meses después del asesinato de la periodista, la fiscalía de Veracruz presentó a Jorge Antonio Hernández Silva como presunto homicida y aseguró que el móvil del crimen fue un robo. El sospechoso fue sentenciado a 38 años de prisión a pesar de que en una audiencia pública denunció haber sido torturado para confesar. Proceso reiteró la postura que tuvo desde que ocurrió el crimen. “No creímos entonces que [las autoridades] esclarecerían el asesinato y no les creemos ahora que han juzgado a quien no se puede defender”, denunció. La sentencia fue apelada en las cortes y el caso sigue abierto. Hace unos días, el semanario alertó de las coacciones al reportero Jorge Carrasco, encargado de investigar el caso. El Gobierno le negó protección oficial, por lo que la revista publicó un artículo incendiario contra Javier Duarte, el presidente de Veracruz.
Bajo el lema “El autoritarismo no callará nuestra voz. Justicia para Regina Martínez a un año del crimen de Estado: no les creemos”, el acto de este domingo en Xalapa, que contó con la presencia del escritor Juan Villoro y unos 200 manifestantes, reivindicó el esclarecimiento de los hechos y reiteró la demanda de justicia.
“Nos hemos encontrado con compañeros que debieron salir de Veracruz durante un tiempo por amenazas y con otros que han sido llamados a no marchar, con lo que se arriesgan a perder sus puestos de trabajo”. En este sentido, Turati asegura que varios periodistas han recibido la petición expresa de no adherirse a la protesta desde el departamento de comunicación social del propio Estado.
Veracruz está considerada la región más peligrosa para ejercer el periodismo en México. Entre mayo de 2011 y junio de 2012, nueve profesionales de los medios de comunicación han sido asesinados y tres han desaparecido. Pese a ello, a comienzos del mes de abril,la Asociación Mexicana de Editores de Periódicos entregó a su gobernador, Javier Duarte, un premio por la defensa de los periodistas. Varios diarios se deslindaron de ese galardón, airadamente protestado en las redes sociales y en algunos medios.
La Comisión Nacional de Derechos Humanos señala que desde el año 2000 81 periodistas han sido asesinados en México. Aunque las cifras varían de unos organismos a otros, la asociación Artículo 19 denuncia en el informe del primer trimestre de 2013 que se registraron durante este período 50 ataques, lo que representa un 20% más que el año anterior. La persecución a la prensa se recrudeció a partir de 2006, cuando el presidente Felipe Calderón declaró la guerra contra el narcotráfico. Los dos asesinatos de este año, las desapariciones, los secuestros y múltiples ataques contra las sedes de medios ocurridos en lo que va de 2013 no parecen indicar que la tendencia vaya a revertirse con la llegada de Enrique Peña Nieto a la presidencia mexicana.
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