Las sociedades urbanas del siglo XXI enfrentarán a corto plazo el problema de la basura, que tiene dos caras: una, la principal es que la sociedad del hiperconsumo, la posmoderna, genera mucha basura, millones de toneladas diarias se acumulan en todo el mundo; la segunda, es que ya no quedan hay sitios para depositarla en donde no causen problemas de malos olores e infecciones; siempre son focos de contagio para la sociedad cualquiera que ésta sea.
Hay un tercer elemento que debe introducirse en el análisis del qué hacer con la basura para entender el fenómeno a cabalidad. Es que la basura es una mina de dinero para aquellas empresas que se dedican a la recolección y al traslado de los desechos hacia los vertederos, legales e ilegales, donde miles de personas esperan ansiosamente la llegada de los grandes camiones recolectores para empezar la selección de desechos reutilizables: plásticos, papel, vidrio, metales, etcétera.
En el Sur de Italia es la maffia italiana, La Camorra, quien es la controladora del negocio multimillonario de la basura. Esto ha sucedido por décadas en aquella lejana región del sur de la "bota".
El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, ha fijado una reunión de urgencia con varios ministros para resolver la situación que vive en estos momentos la provincia de Nápoles, en el sur del país, donde se suceden las protestas por la instalación de un nuevo vertedero que han derivado en disturbios y actos de vandalismo.
Miles de habitantes de Terzigno y Boscoreale, dos pueblos situados en la falda del Vesubio, a 20 kilómetros de Nápoles, han pasado la noche del miércoles y el jueves combatiendo con las fuerzas del orden. La población, desesperada porque el único vertedero activo de la provincia está situado a 500 metros de sus casas, intenta evitar cada noche desde hace semanas que los camiones descarguen más inmundicia.
El comité ciudadano lleva meses exigiendo el cierre del basurero, enclavado en el Parque Nacional del Vesubio, pero esta semana el Gobierno ha respondido anunciando la apertura de un nuevo colector muy cerca del actual. Y eso ha forjado lo que ya se conoce aquí como la Intifada del Vesubio o la Revuelta de las madres volcánicas, por la participación de muchas mujeres en la protesta.
Del vertedero de Terzigno depende en este momento todo el ciclo de recogida de la provincia de Nápoles, pues es el único activo. Los otros 18 están llenos. Como consecuencia de los problemas en el Vesubio, las calles del centro de la capital están otra vez inundadas de inmundicias.
Durante la noche del miércoles, otra más de tensión junto al volcán, 200 policías han cargado contra un par de miles de vecinos que trataban de evitar la llegada de los camiones. Ha habido dos detenidos, varios contusionados, duros choques entre las fuerzas del orden y los manifestantes, miedo, lágrimas y carreras. A lo largo del jueves la situación se ha agravado y por la tarde los manifestantes han quemado cinco camiones en la localidad de Boscoreale y han tirado piedras, cócteles molotov y otros objetos contra la Policía y los camiones que se dirigen a la zona.
"Ha sido la enésima noche pasada al frío, entre miasmas nauseabundas y cargas policiales", escribía el jueves en su blog Vesubio en Lucha Angelo Genovese, profesor de universidad y uno de los líderes del comité vecinal.
Genovese, el profesor universitario, explica: "La protesta en los municipios vesubianos no está dirigida por la Camorra. Somos gente normal (funcionarios, amas de casa, niños y ancianos), personas exasperadas que luchan por sobrevivir, por un nuevo derecho a la salud y un nuevo plan de gestión de la basura. Todas las instituciones (locales, regionales, estatales) son cómplices de este crimen medioambiental que dura desde hace décadas".
Falta analizar el tema candente de la otra basura: la nuclear, la radioactiva.
Una anécdota que podría ilustrar mejor este tema de la basura y qué hacer con ella.
En el año 2000 me encontraba de vacaciones en la Isla de Puerto Rico, Estado Libre Asociado de los Estados Unidos, cuando de pronto divisé en el horizonte marino varios barcos extraños, era grandes plataformas que transportaban montañas de basura desde La Florida para ser depositadas en la "Isla del encanto". Me quedé estupefacto con el espectáculo de ver navegar la basura hacia territorios lejanos donde depositarla.
Hay que hacer conciencia entre los ciudadanos y autoridades de cada país para evitar que nos ahoguemos entre tantas inmundicias que producen las sociedades modernas.
El reciclaje es una alternativa, pero no es suficiente...
Y qué sucede con los países fáciles de comprar para descargar la basura tóxica?
ResponderEliminarEl nuestro, por ejemplo. Nos enteraríamos acaso de tal negocio corrupto?
Reciclar? Claro que ayuda, algo es algo y si todos lo hiciéramos es un pequeño aporte.
Tengo años de reciclar. Tengo grandes depósitos dentro de la tierra donde hago mi abono orgánico, tengo con ello una pequeña pero hermosa hortaliza.
Tengo 3 basureros en mi cocina.
Ell problema es la invención de materiales que no armonizan con la tierra. El plástico, por ejemplo, podríamos rehusar lo mas que podamos, tratar de no usar bolsas plásticas. Llevar bolsas de tela que podamos usar muchas veces.
Es un poco de amor al planeta.
Cuándo una amiga vió mis basureros hace algunos años, se rió, luego me dijo: les estas quitando trabajo los del basurero.
Cuántas personas piensan como ella? Muchas.
Hay que dar una vuelta por las carreteras de nuestro bello país para asquearse de todos los basureros que hay a sus orillas.
Atitlán? Un basurero gigante!!! Entre aguas negras y basura lo han hecho digno del pertenecer al basurero de país que tenemos.
Me sale mucha ira en estos temas, lo siento. No entiendo como ha llegado a
tanto el problema sin haber tomado medidas.