Esta rememoración quiero dedicarla a quien fue mi mejor amigo en la juventud, Andrés Cuxil Toc, indígena inteligente, culto y brillante, a quien la muerte nos lo arrebató tempranamente por un cáncer incurable en aquellos tiempos.
Un noble o un arístócrata solía definirse por ser alguien que no tenía necesidad de trabajar porque vivía de sus rentas.
Los nobles son los que piensan que uno es rico cuando hay alguien que trabaja para uno.
En México me tocó conocer un personaje aristocrático, venido a menos, inclusive había comprado un título nobiliario en Europa, que le daba el tratamiento de Marqués, pero los ignorantes de esos formulismos le decían: "Señor Márquez". El me refería que su mayor orgullo era no haber trabajado ni un día de su larga existencia.
Hay que hacer de inmediato una acotación, la prohibición del trabajo para la nobleza era el trabajo manual exclusivamente. Los aristócratas que "trabajaban" lo hacían en la política o en la guerra.
Por ejemplo, los hidalgos españoles, en tiempos de Felipe II perdían sus títulos de nobleza si, para no morirse de hambre, hacía algo útil con sus manos.
Las noblezas orientales eran un poco especiales para eso de evitar el trabajo manual, se dejaban crecer las uñas de las manos hasta un metro y medio, para demostrarle al mundo entero que ellos no hacían nada con sus manos, vaya, ni asearse.
En nuestros países latinoamericanos existen familias de abolengo, que dicen descender de reyes y emperadores, con todo un linaje real o aristocrático, y lo único que pueden ostentar con cierto orgullo son ciertos apellidos rimbombantes, a veces son dobles apellidos, separados por un coqueto guión, aunque en la realidad descendieran de campesinos pobres provenientes de España, Italia, Alemania o Francia.
Cuando se pedía un favor para un miembro de una de esas familias viejas y aristocráticas depauperadas, que era un individuo con apellidos de prosapia, generalmente carecía de oficio, y no tenía ni dónde caerse muerto, pero era "todo un caballero" aunque sus ropas fueran raídas, siempre conservaban los buenos modales.
En Guatemala que es todavía una sociedad con resabios coloniales heredados de la Madre Patria, hay familias que se empeñan en demostrar su "pedigree" de nobleza.
Los criollos guatemaltecos perdieron el poder político pero no sus riquezas, ellos mandan ahora a los políticos a los que someten con sus recursos económicos, son los que financian campañas electorales para después pasar a recoger sus dividendos.
Actualmente, la nobleza de la sangre, la que no cuesta, ya no cuenta en casi ninguna parte del planeta.
Sólo cuenta la nobleza moral. Y ésta se encuentra en todas las capas sociales, inclusive entre los más humildes, en ellos hay nobleza moral, también.
Cuando nos encontramos frente a una persona con nobleza moral, nos reconciliamos con la humanidad.
Este es el caso de Andrés Cuxil Toc, mi compañero de andanzas y aventuras en la carrera magisterial, no tenía títulos nobiliarios ni fortuna, ni los necesitaba. Sólo era inteligente, culto y muy curioso. Era trabajador por los derechos de los indígenas chapines, fiel a sus principios morales. Era íntegro, y justo, leal y generoso.
Andrés era moralmente noble, esta es una cualidad que debe ser exaltada en cualquier medio y en cualquier época. Es servir a los demás sin esperar recompensa, en eso consiste en ser una buena persona. El lo fue siempre.
Andrés y yo soñamos juntos una Guatemala diferente, el se quedó a luchar en su tierra Chimaltenango y yo tuve que abandonar la patria muy joven aun.
Pero en su memoria escribo estas palabras sencillas, es el mejor homenaje para un amigo quijotesco como yo.
La Nobleza Moral tendría que ser escrita con mayúsculas siempre. Es una en vías de extinción o no?...de hecho yo noto que hay otro tipo de "valor" que se considera más importante en esta sociedad de la posmodernidad. Es el yo primero y la observación del ombligo propio como tu dices. Lástima.
ResponderEliminar"Cuando nos encontramos con una persona con Nobleza Moral nos reconciliamos con la Humanidad."
Bravo por Andres Cuxil Toc.
La nobleza moral es la única con valor. A diferencia de Meg53, yo si conozco, he conocido personas nobles de verdad. Creo que la mayoría de artistas
ResponderEliminar( poetas, pintores, músicos, escritores) la poseen, como que derivara de una gran sensibilidad. Cuando encuentro a alguien así en mi camino, difícilmente lo podría olvidar, deja huellas inolvidables, me enriquece.
La otra nobleza, huy, huy!!! La he visto de cerca, muy cerca.
Recordaremos a tu amigo, Andrés Cuxil Toc, el que seguramente ha dejado huellas en muchos.
Maria, parece que no me expresé adecuadamente o no me has comprendido tu.
ResponderEliminarAl decir yo que es una que parece estar en vías de extinción intento enfatizar que hoy en día el "yo primero" "el pez grande se come al chico" parecen ser premisas que prevalecen.
La Nobleza Moral no ha muerto...para fortuna de quienes la practican, para quienes la percibimos.