Pensé que ya era prudente cambiar de tema, el mundo enteró se saturó con la información puntual y abundante del rescate de los mineros chilenos.
Sin embargo, un lector(a) que firma así: FrauTodeswunsch, me llama enérgicamente la atención por haberme tragado el cuento de una foto alterada, que según yo vi, decía literalmente: "Estamos, bien, manden putas"; pues resulta que me equivoqué de pe a pa, porque el mensaje verdadero decía: "Estamos bien en el refugio los 33".
El regaño es válido de parte de mi corresponsal anónimo. Por eso digo que es una lástima que el blog no sea interactivo para dialogar con mis críticos.
Pienso de cualquier manera que las necesidades sexuales de los mineros soterrados , estuvieron reprimidas largo tiempo, por motivos forzosos, o no. Eso no lo sabremos hasta que se publiquen los libros de memorias o las entrevistas exclusivas de algunos de ellos que habrán de confesar qué pasó en las entrañas de la tierra, donde un grupo de 33 hombres convivieron las 24 horas del día durante casi dos meses.
Me llama la atención que en todos los pueblos mineros del mundo siempre hay una pequeña "zona roja", donde viven las putas en espera de sus clientes ansiosos que salen de las cavernas, a pesar que muchos de ellos están casados o tiene parejas en amasiato.
Me parece, esta es una mera suposición, igual me vuelvo a equivocar y me vuelven a regañar, que los mineros recién liberados del encierro no visitarán a las putas de la región para entregarse al placer carnal con sus señoras esposas.
Ojalá no descubramos nunca que esos hombres que se tragó la tierra son infieles y putaneros. Confiemos en su adhesión a las sagradas instituciones de la familia y el matrimonio.
Al tiempo, esperaremos a ver qué sucede con ellos...
Quien sabe, con eso que además van a ser muy adinerados..........
ResponderEliminarCuando empiecen a modelar para publicidad y sean aún mas famosos, oportunidades les caerán.
La foto me vino en un mail y pensé que era parte del sentido del humor latino y lo creí, una especie de " estamos re bien".
Estos hombres tendrán que soportar la atención que estará encima de ellos por un tiempo. Un precio a pagar a cambio de los regalos que les harán las casas comerciales, el dinero que les paguen por entrevistas.
ResponderEliminarSaldran a luz sus intimidades, lo que ocurrió dentro de la mina y las cosillas de su diario vivir en cuenta historias de amantes y putas. No me sorprendería. Vidas privadas espiadas
para el deleite de una audiencia que tiene sed de ello.